Para cerrar esta tanda de artículos con consejos básicos, vamos a hablar de las promociones que se llevan a cabo en el lugar de venta con comerciales que animen a la gente a acercarse al stand, conocer mejor el artículo que se promociona y animar a las ventas. Este tipo de promociones suponen un desembolso económico para la marca, pero suelen dar muy buenos resultados si se hacen de la forma correcta.
1-Escoge los establecimientos más adecuados
Cada producto tiene un tipo de comprador determinado y por eso, algunos son más adecuados para promocionar en grandes almacenes mientras que otros pueden funcionar mejor en tiendas de barrio. Las campañas en tiendas de barrio son arriesgadas porque suponen llegar a muchas menos personas, pero tienen la ventaja de que se llega de una manera mucho más directa y relajada, por lo que son ideales para productos de la cesta diaria que se suelen comprar en este tipo de tiendas de barrio.
2-Comerciales que sepan llegar a los clientes
La elección de los comerciales es muy importante. Tienen que ser capaces de hacerse notar, de llegar a los clientes y de acercarse a hablar con ellos sin resultar intrusivos o molestos. La personalidad de los mismos es muy importante y también que el posible comprador se sienta cómodo al hablarles. Por eso, no suele funcionar contratar a un hombre para una campaña de productos de higiene femenina o a una mujer para un producto cosmético que se dirija a los hombres.
3-Elige regalos promocionales que atraigan al cliente al stand
Los regalos promocionales son un gran aliciente para que los clientes se acerquen a ver qué se les ofrece en un stand. Muchos no querrán escuchar a un vendedor soltándoles una retahíla de datos, pero si se les ofrece a cambio un regalo, es posible que ya no les importe tanto escuchar y comprar para probar.
4-Un stand atractivo y diferente
El stand es uno de los elementos más importantes en la promoción. Debe de ser muy atractivo y diferente. Llamar la atención de la gente para que se acerque a ver qué es lo que se ofrece en lugar de marcharse por otro pasillo para evitar al comercial. Si se sabe montar un stand atractivo se conseguirá que los clientes se acerquen solos. El cartón es un elemento clave para la elaboración de estos stands ya que pueden tener formas divertidas, colores muy llamativos y, a la vez, resultan muy fáciles de montar y desmontar, pudiendo colocarse en el momento de la promoción y sacarse al acabar esta sin que supongan un problema ni para el comercio en el que están colocados ni para el comercial, que sin ayuda podrá llevarse el stand plegado bien para guardarlo bien para conducirlo a otro centro comercial en el que hacer la exposición de sus productos.
5-Elige bien el modo de promocionar el artículo
Los artículos dirigidos a los más jóvenes funcionan muy bien con promociones tipo concurso. “Si compras este refresco, podrás lanzar un dardo a nuestra diana de premios” O “obtendrás un código para entrar en nuestra aplicación y ver qué te ha tocado”. En promociones para adultos funciona mucho mejor que puedan ver el regalo y que se les dé de manera sencilla, sin tener que hacer nada más que comprar para poder llevárselo.
6-Prepara algo especial para la promoción en lugar de ventajas
Un estuche promocional diferente, un precio más atractivo del habitual, un regalo… lo que sea, pero algo que sea distinto al acudir cualquier otro día o incluso a cualquier otra hora a comprar el producto. El que ofrece el comercial debe de ser más atractivo y debe de resultar mucho más llamativo para que funcione la promoción y llame la atención de quienes pasan, que no pensarán en retrasar la compra.
7-Escoge bien las fechas y el tiempo de duración
No todos los productos se deben de promocionar en cualquier momento del año. Si vendes un refresco, el verano es el mejor momento para una promoción del mismo y si lo que ofreces es una comida fuerte, como un cocido, siempre apetecerá más probarla en invierno. En estos casos es muy evidente la diferencia y en otros hay que estudiar muy bien el momento adecuado. También hay que estudiar el tiempo que durará la promoción o su horario. Si vas a promocionar pruebas de refresco pueden ser a cualquier hora, pero una prueba de una comida fuerte tiene que ser justo antes de comer o justo antes de cenar, cuando el cliente acude con hambre y está más predispuesto a adquirir estos artículos y a probarlos. A las cuatro de la tarde, todo el mundo querrá probar un café, pero pocos querrán probar un cocido.