Es cierto, somos humanos y algo en nuestros genes nos empuja hacia las gangas de todo tipo. Palabras como “oferta especial”, “A mitad de precio”, “Saldos hasta fin de existencias” y similares encienden una especie de señal en el cerebro de los consumidores y las marcas lo saben.
¡¡Nos encantan las gangas!! Lo digo y lo repito y por eso, si quieres realizar una promoción especial nada mejor que rebajar los precios y hacerlo saber. Las gangas tienen además una doble utilidad.
Por un lado, complacen al cliente que puede encontrar un producto de calidad a un precio muy inferior al normal. Esto no solo les gustará por su bolsillo, también les hará sentir bien consigo mismo si compran algo que normalmente no entra en sus presupuestos.
Por otro lado, a quién vende le sirve para librarse de stocks de cara a la nueva temporada o para renovar la imagen de marca deshaciéndose de todo aquello que tenga el logo o la imagen antigua y que en poco tiempo se prefiera que no esté en las estanterías.
Expositores especiales para gangas
Si vas a sacar una ganga a la venta, lo mejor es hacerlo de modo que destaque entre todo lo demás. Si en el punto de venta se limitan a ponerlo en un cajón de ofertas el mensaje que se transmitirá al comprador será totalmente negativo. Nadie quiere comprar algo que se vende porque ya no se quiere.
Por el contrario, debe de ser un expositor que destaque, que resalte que se trata de una oferta increíble y muy puntual y que hay que aprovechar esa oferta porque es algo excepcional que no se va a repetir.
Esto ayuda también a potenciar las compras impulsivas no programadas, pero desde un punto de vista positivo, ya que el cliente adquirirá algo que realmente es bueno y le va a gustar.
Aprovecha los expositores de cartón para este tipo de promociones, ya que son ideales para este fin dado que son muy baratos y su vida es corta. Justo lo que necesitas para sacar la promoción puntual sin que te suponga grandes gastos.
Gangas no es sinónimo de mala calidad
Si tu marca se ha hecho con un prestigio y un mercado no sería inteligente tirar eso por tierra ofreciendo en oferta algo de mala calidad, totalmente pasado de moda o que no cumple con los estándares de la marca.
Si vas a ofrecer gangas tienen que ser de primera categoría. Por ejemplo, puedes utilizarlas para librarte del stock cuando vas a cambiar de temporada o para realizar una promoción, sacando un producto especial más barato pero de buena calidad.
La clave para que sean buenas gangas es que el cliente se lleve algo que le guste realmente a un precio que lo haga todavía más atractivo. No debe de conformarse, sino de estar realmente satisfecho y de este modo es mucho más probable que acabes fidelizándolo para la marca.
Tienta a tus clientes con buenas gangas
Las gangas, si se saben emplear, pueden crear una cierta complicidad entre la marca y el comprador. Por eso, a veces se refuerzan con mensajes como “Ayúdanos a eliminar el stock” o “Necesitamos vaciar nuestras estanterías”.
Con este tipo de mensajes se crea una cierta complicidad, estás ofreciendo algo bueno, pero a la vez no lo estás vendiendo como un favor que le haces al cliente, sino más bien todo lo contrario, algo que seguramente apreciarán.
Este tipo de detalles son sutiles y muchos compradores ni siquiera son conscientes de su influencia, pero como sucede en todo lo relacionado con el marketing y la promoción en punto de venta, está totalmente estudiado y documentado.