La promocion en punto de venta son posiblemente de las campañas más exitosas que se pueden realizar y también en las que se puede personalizar la promoción para poder ahorrar un poco de dinero, algo fundamental para cualquier empresa.
Los expositores de cartón ayudan a reducir costes por su bajo precio y también porque abaratan los gastos de desplazamiento, algo muy importante y que a veces no se tiene en consideración al escoger expositores y materiales para promociones.
Pero hay otras formas de ahorrar utilizando todos los recursos que una promoción en punto de venta puede darnos, pero haciéndolo de un modo inteligente, dosificando las fuerzas y los medios materiales, para obtener el máximo de beneficio.
Quítale todo el partido a los expositores de cartón
Los expositores de cartón son perfectos para promociones en punto de venta, como hemos dicho muchas veces, por su precio y también por sus posibilidades de diseño. Cuando un cliente precisa de un expositor de cartón puede trabajar en conjunto con nuestros diseñadores para conseguir exactamente lo que está buscando.
No hay un expositor perfecto para todos los clientes, cada producto precisa de un tipo concreto de expositor de cartón, con formas y medidas que se adapten a lo que se quiere vender. Conseguir el mejor diseño es un reto que hay que alcanzar de manera conjunta entre los fabricantes y los clientes.
Todos los detalles son importantes en los expositores de cartón, desde el diseño de las letras hasta los colores. Se trata de un trabajo a conciencia para que pueda dar el mejor resultado posible en la campaña.
Además, cada expositor debe de ser único y diferente ya que si no se diferencia de todos los demás perderá una de sus bazas más importantes, la de llamar la atención del consumidor o la de hacer que este lo identifique con la marca.
Pero los expositores de cartón ofrecen muchas posibilidades para ahorrar, especialmente si la promoción va a ser corta y no se necesita un expositor especialmente resistente.
Por ejemplo, la misma caja en la que se transporta el producto puede convertirse en el expositor cortando por una línea de puntos troquelada. Esto abarata significativamente el coste, ya que se emplea menos material y también, como decíamos al principio de este artículo, el transporte ya que abulta menos.
Usa un tótem para atraer la vista del público en la promoción en punto de venta
En algunos establecimientos en lugar de expositores de cartón únicamente, puede funcionar mejor un tótem de gran tamaño que atraiga la vista del público. Estos tótems tendrán todavía más éxito si el expositor es a la vez que reclamo el lugar donde hay que coger el producto.
Esto es así porque el consumidor siente la llamada de atención y mira qué se le está ofreciendo, pero si no se aprovecha ese momento, recibirá otros estímulos que pueden hacer que cambie de idea, o simplemente se olvide de su intención inicial de adquirir el producto que había visto.
En caso de escoger un tótem se ahorran los expositores de cartón para estanterías, ya que este tipo de reclamos son llamativos y muy válidos por sí mismos. Son especialmente válidos en lugares en los que hay ya demasiado expositores en las baldas y por tanto pierden su poder de llamar la atención.
La fabricación de un tótem y, según el local, el precio de su colocación, es mayor que el precio de un expositor. A cambio, con uno de ellos en un establecimiento no hacen falta ningún otro tipo de reclamos e incluso se puede ahorrar anunciar la campaña promocional de otro modo, ya que en estos expositores se puede poner toda la información de manera accesible para el cliente.
Promoción en punto de venta, solo en horas concretas
Si quieres realizar una promoción en punto de venta utilizando promotores que puedan atraer al público pero quieres abaratar los costes tanto como sea posible se puede realizar un estudio sobre las horas a las que los promotores pueden ser más útiles.
Por ejemplo, si se pretende realizar una promoción de café y se va a regalar la prueba del café seguramente la gente sea más propensa a probarlo por la mañana o después de comer y lo rechace en mayor número cuánto más tarde sea.
De este modo se puede extraer la conclusión de que quizás se pueda realizar la promoción con pruebas las dos o tres primeras horas tras la apertura del establecimiento y un par de horas al inicio de la tarde.
Cada caso debe de ser valorado de manera individual e incluso se pueden realizar diferentes pruebas en distintos establecimientos para poder extraer conclusiones para futuras promociones.
Así, no se gastará más dinero del necesario en sueldos de promotores, concentrando su trabajo en el momento en el que este puede ser más útil.