Los PLV son elementos clave en la estrategia de marketing en el punto de venta, ya que captan la atención de los consumidores y promueven la venta de productos. Sin embargo, el tamaño de estos elementos puede generar dudas sobre su eficacia y relevancia.
En este artículo, exploramos la importancia del tamaño en los PLV y cómo puede influir en el impacto de las campañas publicitarias en el punto de venta. Descubriremos si el tamaño realmente importa y qué aspectos debemos considerar al elegir el tamaño adecuado.
Ponte en situación: Vas andando por la calle muy transitada del centro de tu ciudad donde existen cientos de tiendas, tanto grandes como pequeñas. Tiendas de ropa, de cosmética… Este día en concreto, estás buscando un bronceador para esta temporada y sabes que en esa misma avenida hay tres locales especializadas en este tipo de productos.
Dos de ellas están situadas casi al lado. Una de ellas cuenta con un tótem publicitario en la puerta de grandes dimensiones que, además, anuncia una conocida crema de bronceadores. La otra tiene un pequeño display en el escaparate. ¿A cuál de ellas vas a entrar primero?
Esto es tan solo un ejemplo para que puedas ser consciente de la importancia que tiene el tamaño en este tipo de productos.
El tamaño es importante en publicidad porque supone un medio de atención increíble. Elegir un tamaño grande tienes las siguientes ventajas:
#1. Resaltar un determinado mensaje más fácilmente
Si eliges un cartel publicitario con una oferta o una promoción interesante y la persona tiene que acercarse mucho a verla, quizás desista o, simplemente, piense de dejarlo para más tarde (y nunca vuelva).
Si eliges un expositor grande, podrás también colocar letras grandes que sean vistas a gran distancia y por la mayoría de personas. Con esto tendrás mucho ganado.
#2. Incluir más información
En los PLV de poco tamaño no se puede incluir demasiada información. Es cuestión meramente de tamaño.
Si, por ejemplo, quieres informar sobre una determinada oferta para que el cliente no tenga que estar preguntando constantemente o quieres explicar las condiciones de un determinado servicio, debes elegir un cartel de dimensiones grandes.
Es cierto que en la actualidad, se pueden incluir letras pequeñas en carteles pequeños para que todo quepa, pero… ¿Esto va a serle útil a un cliente que intenta informarse sobre tus productos o servicios? Seguramente acaba yendo a otro establecimiento donde le pongan las cosas más fáciles desde el principio.
#3. Es más fácil de troquelar
Si estás buscando una forma diferente en tu PLV. Una forma arriesgada que llame la atención puedes optar por troquelar el cartón de diferentes maneras. Sea como sea, siempre va a ser mucho más sencillo hacerlo si disponemos de un amplio volumen de cartón.
En caso de que el espacio para trabajar sea reducido, siempre va a costar más hacerlo y la calidad puede verse resentida.
#4. Puedes ponerlo en el exterior más fácilmente
Si quieres llamar la atención de los transeúntes que pasan por la calle siempre va a ser más sencillo poner un PLV de grandes dimensiones. Este tipo de publicidad, en especial los tótems publicitarios, están adaptados para poder sujetarse en el suelo sin problemas. Esto te permitirá colocarlo, por ejemplo, en la entrada de tu comercio. Algo que, sin embargo, no podrás hacer (al menos con tanta facilidad) si eliges un producto pequeño.
#5. Captan más la atención del público de fuera
Si cualquier persona pasa por un escaparate y ve un gran cartel anunciado, una oferta, una liquidación o los “jugosos” fin del stock, siempre va a ser más fácil que decida entrar que si no tiene la oportunidad de ver el cartel por tener un tamaño demasiado pequeño.
¿Grande o pequeño?
Todo depende de para qué quieras usarlo. Si lo que estás buscando es un expositor de sobremesa para exponer un perfume que acaba de salir al mercado, no puedes decantarte por un expositor de gran volumen. Además de resultar molesto a la hora de cobrar, le quitará espacio a otros productos y no quedará bonito, estéticamente hablando.
Es por eso, precisamente, por lo que el tamaño adquiere una gran importancia en la publicidad y debe ajustarse estrechamente al producto o servicio que se quiere publicitar.
Solo hace falta darse un paseo por el centro de la ciudad para ver los cientos de carteles publicitarios y expositores que existen. El grande suele actuar como anzuelo, mientras que los pequeños suelen actuar como un accesorio informativo que se otorga cuando el cliente ya ha mostrado interés por el producto.
Como puedes ver, en cuestión de PLV el tamaño SÍ importa. Elegir un PLV mediano, grande o pequeño requiere un análisis previo. Si tienes dudas o necesitas asesoramiento… ¡Contáctanos! Te ayudaremos en todo lo posible.